Descubriendo Londres... y Suneeta Cosmetics - Aida

¡Recordad que estoy de sorteo!

Y por fin... ¡os escribo desde tierras británicas! Perdón por estas semanas in publicar nada, pero ha sido todo un reto encontrar un piso medianamente decente (y por medianamente en realidad quiero decir minimísimamente... Acabamos de descubrir que tenemos ratones, no digo más) e irme asentando. Además, el ordenador no me fue por un tiempo... ¡Una liada! Pero ahora que ya está solucionado (lo del ordenador sólo, desafortunadamente) y estoy más tranquila y me he ido acostumbrando otra vez a la gente del norte, con suerte puedo retomar el blog y ¡seguir publicando un par de veces a la semana!

En el sorteo (¡que está a punto de acabar!), muchas habéis pedido que os hable de productos ingleses o de tiendas que encuentre por Londres, así que no veo mejor manera de "inaugurar" mi etapa británica a través del blog que con un descubrimiento que hice la semana pasada en Brick Lane, una calle muy hipster y modennah con una increíble variedad de oferta gastronómica (aquí se lleva mucho lo de los food trucks y la comida "callejera" de cien mil partes del mundo) y mucho mercadillo. Si me seguís por Instagram, ya habréis ido siguiendo mis aventurillas londinenses. 

Me he hecho de rogar, lo sé, pero... Por fin vuelvo al #blog! Estad atentas porque mañana por la mañana publicaré un #post y os hablaré de @suneetacosmetics, una marca de #cosméticos naturales que he descubierto en #Londres y que sólo se puede encontrar en #Camden y en #BrickLane. No os lo perdáis!

Una foto publicada por Aida Domínguez (@lunadecoco2) el 20 de Oct de 2015 a la(s) 3:31 PDT

La cosa es que mientras paseaba para descubrir el barrio y hacer un poco de hipster (realmente yo llamaba mucho la atención, todo el mundo me miraba... aunque quizás era porque era la única en Brick Lane que no iba vestida a lo videoclip de los 80), descubrí un puestecito en el mercado bajo el nombre de "Suneeta Cosmetics". Tenían aceites, cremas, exfoliantes, desodorantes, dentríficos, jaboncitos... Todo ecológico, sin parabenos y con ingredientes naturales y orgánicos. La verdad es que se me fueron los ojitos rápido y pronto tenía al chico del puesto explicándome los mil y un tipos de aceites naturales que usaban para elaborar los cosméticos... Ante tanta chuchería una no puede resistirse. Además, cada "potecito" salía por 1 libra, y si comprabas 5 te regalaban un sexto producto. Obviamente, caí en la tentación...

Las seis cositas que me compré fueron:

• Bálsamo labial de menta y miel
• Crema facial de almendras e Ylang Ylang
• Crema facial nutritiva de noche
• Tónico de flor de naranjo y aloe vera
• Exfoliante de lima y coco
• Jabón de aceite de oliva y miel

¿Qué me han parecido?

Tónico de flor de naranjo y aloe vera

Empecemos con lo que más me llamó la atención del stand nada más verlo. Se trata de un tónico de flor de naranjo y aleo vera que además contiene aceite de hierbabuena. Como todos los productos de Suneeta Cosmetics, no tiene preservativos ni químicos, sino que los ingredientes son naturales. Por ello, su fecha de caducidad es a finales de diciembre.

Su olor no me gusta demasiado, es algo amargo y no me resulta nada agradable. Para aplicarlo, empapo un algodoncito en este tónico para después tonificar mi piel con éste. Como digo, el olor resulta amargo, pero el resultado me encanta. Tras aplicarlo, tengo la sensación de tener una piel más radiante y ligeramente más hidratada. No me reseca la frente (que suelo tener súper seca) ni me engrasa la nariz (donde suelo tener más grasilla), y la piel me queda muy suave. Sin duda, pienso repetir, aunque quizás pruebe algún otro tónico para ver si el resultado es el mismo pero el olor mejora. 

Bálsamo labial de menta y miel

El labial de menta me pareció de lo más curioso, y me llamó mucho la atención de entre las diferentes opciones de sabores que había en el puesto. Sus ingredientes son: cera de abeja, aceite de almendras dulces, miel y aceite de hierbabuena. Caduca en un año (septiembre de 2016) y, como todos los productos de Suneeta Cosmetics, nos informa en su envase que puede contener trazas de frutos secos (en este caso el aceite de almendras, supongo).

Perdón por la malisísísíma calidad de la foto! :(

Hasta el momento lo he estado usando a diario porque me gusta llevarlo en el bolso. Refresca mucho los labios a la vez que los hidrata con suavidad, sin dejarlos grasos. Se nota que es un cosmético hecho a base de aceites, pero a mí me resulta muy ligero. Repetiría sin duda, me gusta cuánto suaviza mis labios (en seguida se me cortan los labios con el frío) y lo refrescante que es el efecto mentolado.

Crema facial de almendras e Ylang Ylang

Y como no todo podía ser bueno... Empecemos con lo que no me ha gustado de la marca, esta crema facial. Está hecha con aceite de almendras dulces, manteca de cacao, aceite de Yang Yang, aceite de rosas y aceite de benjuí. Quizás ese sea el problema, que más que una crema es un aceite "frío" que se deshace al contacto con la piel, como sucede con el aceite de coco. Es una maravilla cómo hidrata y suaviza la piel, eso sí, pero deja mi cara súper grasa, así que sólo la acabo usando donde tengo psoriasis o por las noches ya que a la mañana siguiente me ducharé y se quitaré la aceitosidad.

Lo bueno es que al ser aceite, cunde mucho y con pasar un par de dedos por encima tenemos suficiente para hidratar nuestra piel facial. Es una lástima que me engrase tanto, porque su olor me encanta, es dulzón pero discretito, muy ligero. Sin embargo, dudo que vuelva a repetir.

Crema nutritiva de noche

Con esta "crema" (que es en realidad un "aceite sólido"), me pasa lo mismo. Es un hidratante con incienso y lavanda que deja la piel muy nutrida (y con un agradable olor a lavanda), pero que me la engrasa mucho, porque no deja de ser aceite. Sus ingredientes son: manteca de karité, aceite de almendras, aceite de incienso (primera vez que lo oigo) y aceite de lavanda.

Como con la anterior, utilizo los dedos para hacerme con un poco de mejunge aceitoso y aplicarla sobre la piel, pero sólo la uso por las noches. No me deja la piel tan grasa como la otra, pero aún y así tampoco se salva. Me duele porque me encanta de nuevo su olor (y eso que la lavanda no me tira demasiado) y deja mi piel muy nutrida, pero no creo que vuelva a repetir. 

Exfoliante de lima y coco

Para compensar los dos "desengaños" anteriores, este exfoliante ha sido lo que más me ha gustado con diferencia. Es decir, en general todo me ha dejado con bastantes ganas de probar más cositas de Suneeta Cosmetics, pero es que este producto ha sido demasiado.

Amor hecho scrub

Su color es amarillo limón, huele de maravilla a cítricos y el tacto es, una vez lo "deshaces" un poco sobre la piel mojada, como aceitoso (sin ser pesado). El grano es diría que pequeño-medio, aunque lo que exfolia en sí no me parece tanto el grano, sino lo que me recuerda más bien al coco rallado en cuanto a textura. Cuando me lo aplico, siento cómo me exfolia en profundidad y el aceite de lima y de coco me alivian la piel, nutriéndola y dejándola suave. Cuando me seco la cara (hasta el momento sólo le he dado uso facial), me noto la piel muy suave y bonita y más radiante. De verdad, de verdadísima, que me queda la piel espectacular. Sin duda, es una gozada de producto con el que pienso repetir.

Jabón de aceite de oliva y miel

¡Qué iba a ser de mí sin probar también un jaboncito...! Suneeta Cosmetics ofrece varios tipos, y me costó decidirme netre uno con pétalos de rosa y éste, pero al final me decanté por el de aceite de oliva y miel porque me dio la sensación de que iba a ser más hidratante. Y el otro no sé cómo será, pero este es, sin duda, hidratante. Y mucho. De nuevo se nota el uso de aceites naturales en el cosmético, ya que limpia la piel (hace una espumita ligera que me alegra las mañanas) dejando sobre ella como una película muy ligera de aceite que, al secarme con la toalla, hace que mi piel (de naturaleza sensible y seca) no se queje tanto como de costumbre. El olor es bastante neutro, no demasiado fuerte, pero muy agradable. Insisto, ¡este jabón me alegra un montón las mañanas!

Me va a dar jabón para un par de meses como mínimo, pero estoy segura de que repetiré, aunque antes quizás pruebe el de rosas que tantó me tentó o algún otro jabón de la variedad que ofrecen.

***

En definitiva, si tenéis planeada una visita a Londres y podéis pasaros por Brick Lane (o Camdem Market, donde he leído en su web que a veces también ponen stand), os recomiendo dejaros caer por su puestecito y caer en la tentación con alguna cosita, porque, menos las cremas, que han resutlado ser demasiado aceitosas para mi piel facial, el resto de productos me ha conquistado... ¡y de qué manera!

¿Qué producto de los que os enseño os gustaría probar más?

¿Por alguna remotísima casualidad alguna conocía esta marca?

Aida